La jornada del martes no tuvo un buen comienzo con la rebaja de calificación a la deuda de Portugal, pero luego se conoció el resultado de la licitación de la colocación de deuda de Grecia y el panorama cambió. Los griegos colocaron Letras al 4,60%, una tasa inferior a la estimada por el mercado.
La buena noticia fue que Wall Street recibió sus primeros balances de empresas con ganancias superiores a lo que estimaban los analistas, esto hizo que las Bolsas del mundo crecieran notoriamente.
Esto provocó un importante impacto en la Argentina ya que el mercado de bonos, absorbió cada toma de ganancias que se produjo.
El Global 2017, el tÃtulo emblemático que el Gobierno sigue de cerca, siguió en alza. Subió un 0,87% y cotizó a u$s91,16, su precio más alto desde que nació con la reapertura del canje de la deuda.
Otros, como el Discount en pesos ya subieron un 9,1% en julio. Su tasa de retorno es clave porque equivale a la que deberÃa pagar la Argentina si quiere tomar dinero en el mercado internacional.
El retorno del Global 2017 bajó a menos del 11%. La Argentina quiere lograr una tasa inferior a 10% para financiarse y dejar de echar mano a sus reservas para pagar los vencimientos.
Las reservas siguen creciendo y son la mejor garantÃa del pago de los bonos. Ya están en u$s50.339 millones. En cuanto a los bonos, se nota un desplazamiento de los inversores hacia los bonos en dólares de mediano plazo.
Los bonos en pesos, están atados por las mediciones del INDEC. Estos bonos se arbitran contra el dólar y son muy volátiles. Como el dólar está quieto, cualquier inversión en pesos deja buenas ganancias en divisas.