La fragilidad de la libra esterlina es un reflejo de la situación que atraviesa Reino Unido, que ya va por su sexto trimestre de recesión.
Asà es que el gobernador del Banco de Inglaterra, Mervyn King comentó que una libra más débil ayudarÃa a reequilibrar la economÃa británica. Pero el la actualidad, tanto la libra esterlina como las acciones británicas se rigen por fuerzas que poco tienen que ver con la economÃa del paÃs.
En las últimas semanas el cruce entre el euro y la libra esterlina estuvo experimentando ciertos cambios, y por segunda vez desde el nacimiento de la moneda única en 1999, aquel anhelo de alcanzar la paridad con la divisa británica comienza a tornarse algo más tangible.
La primera vez que el euro logro acercarse a la libra esterlina fue el 1 de enero de 2009, cuando el euro marcó su máximo histórico en las 1,019 unidades por libra, o también, 0,98 libras por euro. Hoy en dÃa la moneda europea vuelve a rondar esos niveles, dado que esta semana tocó los 1,07 euros, aunque para empatar con la libra el euro aún deberÃa apreciarse un 6,5%.
A pesar de esta brecha, esta distancia no es tan insalvable, ya que desde mediados de junio el euro se ha revalorizado un 9,7% contra la libra, y si nos vamos un poco mas hacia atrás, en los doce últimos meses el euro logro apreciarse un 16,3% contra la divisa británica.
En definitiva, las puertas de la paridad para el euro se han vuelto a abrir, aunque si las traspasa o no dependerá de dos variables: la recuperación y los bancos centrales.